Jonas Ohman
Fotografía de:
Blue/Yellow Foundation
Por segundo año consecutivo, el Grupo Yukon se enorgullece de contribuir a la campaña Radarom, una iniciativa civil destinada a recaudar fondos para apoyar a los soldados ucranianos que defienden no solo la libertad de su nación, sino la de toda Europa frente a la agresión rusa.
Aunque los dispositivos Pulsar están diseñados para un uso civil, la empresa detrás de la marca se mantiene firme en su apoyo a Ucrania. Este año, el Grupo Yukon es uno de los mayores apoyos de Radarom, con una aportación económica de 200 000 euros.
En mayo, tuvimos la oportunidad de hablar con Jonas Ohman, director de la Fundación Blue/Yellow, sobre la fatiga de la guerra, la situación en el frente ucraniano y la inminente amenaza de un enfrentamiento bélico. La fundación, que dirige Jonas, no solo es un organizador fundamental de la campaña Radarom, sino también una de las organizaciones más antiguas e importantes de Lituania, dedicada a apoyar a Ucrania en su lucha por la libertad.
Desgraciadamente, no, no habrá buenas noticias a corto plazo. Hay varias razones para ello. En primer lugar, Rusia ha intensificado sus esfuerzos, haciendo de la derrota de Ucrania una de las principales prioridades de la Rusia de Putin, y está movilizando todos sus recursos hacia este objetivo. Conocemos el alcance de las capacidades militares rusas, y están plenamente desplegadas en Ucrania.
En segundo lugar, tras la resistencia inicial a la movilización dentro de Rusia, ahora se está atrayendo a los soldados rusos al frente con incentivos financieros. La reserva de reclutamiento es muy vasta y se extiende más allá de las fronteras rusas, a lugares como Nepal y Cuba. A pesar del elevado coste humano para Rusia, no muestra signos de que vaya a detenerse.
Aunque la ayuda llega, a menudo lo hace con seis meses de retraso. Ucrania se encuentra actualmente en una situación más precaria que en 2022. Cuando visito las unidades, compruebo las carencias de efectivos y recursos. Sé cuántas personas debería haber, y veo cuántas hay. Ucrania no está preparada para una ofensiva a gran escala, e incluso los esfuerzos defensivos están resultando difíciles.
Tampoco hay perspectivas de una resolución diplomática. No hay ningún punto en común entre ambas partes. No sé por qué Occidente cree que esta guerra acabará pronto. Para Rusia, esto se ha convertido en una forma de vida. No debemos olvidar que Rusia tiene aliados, como China, que la apoyan indirectamente. Vemos pruebas de esto en el frente, como los proyectiles fabricados en China.
Empezó de forma bastante sencilla. Aunque soy un sueco pacífico que vive en Lituania, serví en una unidad de inteligencia sueca y desde entonces tengo un cierto interés personal en el desarrollo militar ruso. En 2014, cuando Rusia se anexionó Crimea, reconocí las señales de las fuerzas especiales rusas y me di cuenta de que Rusia estaba atacando a un país vecino.
Cuando estalló la era en el este de Ucrania, estaba claro que Rusia estaba mejor preparada. Habían ideado una astuta estrategia para ocupar territorios extranjeros al tiempo que negaban su presencia. El mundo estaba desconcertado y el ejército ucraniano se encontraba en baja forma. Yo estaba profundamente preocupado y decidí ayudar.
Con el apoyo de amigos, conocidos y personas de ideas afines, empezamos a enviar ayuda a Ucrania y creamos la Fundación Blue/Yellow. Ya entonces, los lituanos comprendieron la gravedad de la situación y unieron sus fuerzas, aportando importantes recursos. Dejé mi carrera en el cine para ganarme la vida enseñando sueco, lo que me permitió dividir mi tiempo entre Lituania y Ucrania, aunque fue todo un reto. Mi trabajo no siempre es agradable, pero es satisfactorio y relevante.
A menudo digo que somos como una empresa emergente de seguridad, y experimentamos un enorme aumento en 2022 tras la invasión a gran escala de Ucrania por parte de Rusia. Yo todavía estaba en Ucrania cuando comenzó la invasión y, cuando salí de allí, recibí una llamada de un compañero: «Jonas, tenemos un millón en nuestra cuenta. No, dos millones. No, tres millones». Las empresas lituanas reaccionaron rápidamente y varias de ellas hicieron donaciones importantes cada día.
Jonas Ohman
Tanto en términos sociales como empresariales, Lituania está mejor que nunca. La situación económica ha ido mejorando constantemente durante los últimos veinte años. Así que, en mi opinión, los recursos están ahí.
Sin embargo, cuando hablo con líderes empresariales, a menudo me dicen: «Lo siento, Jonas, pero este año tenemos otras prioridades, otros proyectos que desarrollar». Psicológicamente, les entiendo. Nos hemos acostumbrado a la guerra; empieza a parecernos algo normal. Pero intento convencerles de que este mega desafío geopolítico debe abordarse hasta el final, o nosotros seremos los siguientes. Me parece que no nos tomamos esta amenaza suficientemente en serio, creyendo quizá que las grandes potencias occidentales la resolverán.
No obstante, me gusta trabajar con las empresas porque entienden bien que el hecho de que vivamos bien ahora no significa que vayamos a vivir bien la semana que viene. Por eso no me tomo tan a pecho la menor contribución a Radarom, comparada con la del año pasado que reunimos 14 millones de euros. Sí, la cantidad ha sido menor y la motivación ha cambiado, pero sigue siendo un apoyo significativo.
Absolutamente. La visión nocturna es fundamental. Es una tecnología relativamente asequible, pero muy eficaz y ha demostrado su importancia una y otra vez en las unidades ucranianas. Permite asegurar el perímetro, saber lo que ocurre a distancia y detectar a los enemigos desde largas distancias. La imagen térmica es otra de las cosas que proporcionamos. Puede montarse en ametralladoras, utilizarse para detectar francotiradores y, lo que es muy importante, para detectar drones. Por ejemplo, el dron Shaheed emite calor, y esto hace que sea detectable con dispositivos de imagen térmica. En general, los dispositivos de imagen térmica y de visión nocturna son actualmente indispensables en el campo de la guerra de drones y antidrones.
Antes de comprar cualquier dispositivo de visión nocturna o térmica, asegúrese de respetar la legislación local y de utilizarlo solo cuando esté permitido. Nuestros embajadores proceden de varios países y viajan mucho, lo que les permite probar diferentes dispositivos. No fomentamos ni apoyamos el uso ilegal de nuestros dispositivos en ningún evento. Si desea obtener más información sobre la política de restricción de exportaciones y ventas, visite el siguiente enlace: Política de restricciones de exportación y venta.