Fotografía de:
Gytis Vidžiūnas
Para nosotros, la caza es muchas cosas: una pasión, una vía de escape y una forma de cuidar la naturaleza. También es una oportunidad fantástica para explorar nuestro maravilloso mundo y conocer gente increíble. Y cuando grabábamos el vídeo de producto del nuevo Pulsar Merger LRF XL50, pudimos disfrutar de todos los aspectos de la caza.
Volamos a Kristiansund, al oeste de Noruega, justo al lado de la costa del mar noruego, donde nos recibieron Erik Aspen Bakke, representante de Teno Astro, que es el distribuidor de Pulsar en Noruega, y Andrea Lysvold, una cazadora y nuestra embajadora nórdica en las islas Lofoten.
A diferencia de lo que pudiera esperarse, los vídeos de nuestros productos tratan, ante todo, de las personas y la naturaleza, y los dispositivos no son más que una herramienta para disfrutar mejor de ella. Así que, con todo esto en mente, les proponemos conocer un poco mejor a nuestros personajes y disfrutar de algunas imágenes de los momentos de la grabación del vídeo, que hemos vivido entre bastidores.
Andrea Lysvold, conocida como la cazadora de Lofoten en las redes sociales, tiene apenas 26 años, pero ya cuenta con bastante experiencia en la caza. Y todo empezó de forma bastante inesperada: «Solo quería sacarme la licencia para poder disparar armas. Nadie en mi familia caza, así que no fue hasta que empezó el curso cuando empecé a interesarme por la caza. Desde el día en que me saqué la licencia, me enganché completamente a esto y he sido una cazadora muy activa desde entonces. Además de ser cazadora, soy madre de un increíble hijo de 4 años».
La historia de Erik es bastante diferente de la anterior: en su caso, la caza le viene de familia. «Vengo de una familia de cazadores. Mi padre cazaba constantemente durante el otoño. Vivíamos en el norte de Noruega, y crecí básicamente entre urogallos y liebres salvajes. Escupir perdigones de plomo de mi escopeta en el plato de la cena era algo habitual en mi casa. Es extraño que no me haya muerto de un «envenenamiento por plomo», del que se habla tanto.
Cuando tuve edad para ello, empecé a salir a cazar con mi padre y aquí, donde vivo actualmente, he estado cazando corzos con él y mi tío desde la adolescencia. Recuerdo que mi padre y mi tío me dieron una escopeta y cartuchos para que pudiera practicar tiro al blanco con 9 o 10 años. Así ellos podían charlar tranquilamente.
No empecé a cazar ciervos por mi cuenta hasta que me mudé aquí, cerca de Kristiansund, hace 20 años. Mi tío me llevó a cazar ciervos (ya que era el dueño del coto) y, con el tiempo, conseguí un puesto en el equipo de caza. Ahora, la mayoría de los cazadores están jubilados o han fallecido. Solo quedamos una chica y yo en el equipo de caza. Ella no vive aquí, pero viene de vez en cuando durante la temporada. Así que cazo mucho en solitario. Pero mantengo una buena comunicación y cooperación con los vecinos de otros cotos de caza, así que no cazo completamente solo todo el tiempo».
La amistad y la cooperación es un tema recurrente siempre que hablamos con otros cazadores. Compartir intereses comunes es siempre la clave para mantener relaciones que duren toda la vida y los intereses comunes sirven para acercar a las personas. Erik confiesa que le encanta compartir anécdotas de caza con otros cazadores, practicar en el campo de tiro con compañía y ayudar a otros cazadores, o bien recibir ayuda, para despellejar y abatir la presa.
A Andrea, las amistades también le han aportado una de las cosas más importantes de la vida: la oportunidad de viajar. «Empecé a cazar en Lofoten, pero siempre he sido una persona muy curiosa, así que quise aprender todos los tipos de caza y empecé a viajar para visitar a amigos que fui conociendo por internet. Después de un tiempo, tenía amistades en muchos países y lugares diferentes y me encanta viajar para cazar. La mayoría de estas amistades surgieron a través de las redes sociales. Pero el privilegio de estar en equipos de personas con ideas afines, como los de la familia Pulsar, también ayuda a conocer a mucha gente con talento. No solo he cazado con ellos, sino que también he aprendido un montón de lecciones valiosas gracias a ellos».
Por supuesto, es a través de la familia Pulsar que Andrea llegó a rodar también en Kristiansund. Admite que se alegró mucho de que la invitaran, aunque probablemente ninguno de nosotros podía prever los retos a los que íbamos a enfrentarnos. Noruega tiene fama de tener un clima riguroso, pero lo que nos encontramos allí estaba a otro nivel. Incluso Andrea admitió que fue un verdadero reto, ¡y eso que ella procede del Círculo Polar Ártico!
Pero nada de eso arruinó la experiencia en general: «Era mi primera producción de este tipo y me encantó. Aprendí mucho y me divertí mucho en todo momento. Además, Kristiansud cuenta con una numerosa población de ciervos rojos, que son animales increíbles para cazar. Poder cazarlos en un lugar precioso del oeste de Noruega es un sueño».
«Cazar en el noroeste de Noruega es muy agradable porque tenemos a nuestra disposición todo tipo de animales y una naturaleza muy variada. Lo más habitual es cazar ciervos rojos y corzos, puesto que su población es muy numerosa y son los que más daños económicos causan a las tierras de cultivo. Pero también es posible cazar alces, urogallos, focas, zorros, gansos, visones, martas y, a veces, linces. Puede que me haya olvidado de alguna especie», comenta Erik, y tal vez podríamos creer que él está haciendo promoción o trabaja para el departamento de turismo local, si no lo hubiéramos comprobado por nosotros mismos.
«Lo mejor de cazar en esta zona es probablemente la naturaleza. Es muy variada, desde las montañas a los bosques, pasando por los campos y el mar. Cuando se sale a las montañas, siempre ves preciosas vistas de los fiordos y del océano Atlántico. Y también puedes ver las montañas y el terreno al otro lado de los fiordos. En mi opinión, este clima duro es positivo para la caza porque la lluvia y el viento camuflan los movimientos de los cazadores», continúa Erik. Y aunque intentó disuadirnos describiendo el clima local, con fuertes vientos y todo tipo de precipitaciones, sus relatos sobre la vida en la región siguen pareciéndonos increíblemente atractivos: «Es un lugar muy tranquilo para vivir. Puedo ir directamente al bosque y a la montaña desde mi patio trasero. Se puede pasear por la carretera sin ver ningún coche, tenemos fácil acceso al agua (ya que estamos rodeados de manantiales) y podemos pescar siempre que queramos. También solemos hacer excursiones con nuestra barca y, en verano, podemos bañamos prácticamente en cualquier sitio. Es un lugar muy seguro y todo el mundo se conoce entre sí. Además, hay lugares donde puedo disparar mis armas y a nadie le preocupa, ni le parece mal en absoluto».
Si no está pescando, practicando, trabajando o pasando tiempo con sus hijos, es muy probable que Erik esté cazando ciervos: «La mayoría de las veces se trata de salidas matinales y nocturnas en terrenos bajos o en campos, bien desde nuestra torreta o tumbados en los límites de los campos. También cazo en los montes, que es probablemente lo más difícil, ya que los ciervos son muy cautelosos allí porque por lo general, es un lugar muy tranquilo».
Aunque normalmente solo dispone de un par de horas de luz para cazar, Erik puede ampliar este tiempo con la ayuda de la visión térmica: «Lo que más me gusta de la visión térmica es que puedo cazar cuando me apetezca, sin restricciones, ni obstáculos por culpa de la luz. Y eso vale su peso en oro cuando tienes un trabajo diurno y varios hijos en casa.
No tenemos mucho tiempo antes de que anochezca aquí en esta parte de Noruega. La temporada de caza empieza en septiembre, y la luz está bien, pero cada día oscurece más rápido. En un par de meses, anochece a las 5 de la tarde. Con una óptica normal, solo podríamos cazar bajo la luna llena a esa hora. Excepto, por supuesto, a mediodía. Pero entonces, los animales están en el monte y la gente está trabajando. Sin embargo, con la visión térmica, podemos cazar en cualquier momento. Ya no tengo que preocuparme por la luz del día o la hora del crepúsculo. Es un cambio increíble y una gran ayuda para los equipos de caza en Noruega».
Dejando a un lado los aspectos prácticos personales, este cazador noruego subraya que la ética es la mayor ventaja de las térmicas. «Aquí, la mayoría de los ciervos se abaten en la hora del crepúsculo. Y es también cuando la mayoría de los animales resultan heridos por malos disparos y cálculos erróneos. Por lo tanto, considero que la visión térmica es una herramienta más respetuosa con los animales que la óptica normal. Puedes hacer mejores disparos y más seguros en condiciones de escasa visibilidad. Otro factor a tener en cuenta es que los animales sufren menos estrés. Puedes cazar y disparar a los animales durante la noche, cuando estos no sospechan ningún peligro y están tranquilos, por lo que, de nuevo, resulta más ético».
Mientras tanto, Andrea solo tuvo unos días para probar la visión térmica en Kristiansund, pero ha sido una usuaria frecuente de los dispositivos en el norte, en las Lofotens, donde los encontró extremadamente útiles: «Por ejemplo, en el lugar donde cazo alces, esta temporada ha sido muy dura y el equipo de cazadores no podía avistar ningún animal.
Cuando me llevé el Merger, pudimos ver a los alces en las cimas de las montañas y planificar mejor el tipo de caza. Utilizar un visor térmico no te ayuda a cazar, y el acecho y la caza siguen siendo un reto, sobre todo en una zona como la nuestra, donde el terreno es muy abierto. Casi no hay lugares dónde esconderse, así que ir al acecho resulta difícil. Los visores térmicos son una herramienta increíblemente útil para esto, pero también lo es, en el caso de animales heridos. Ayudan a que la duración de la búsqueda sea mucho más breve. También es todo más seguro: cuando miras a través del Merger en un terreno extenso, puedes ver a todos los demás cazadores y a los perros a grandes distancias, con lo que tienes una visión mucho mejor de toda la escena».
Por supuesto, el Merger del que habla Andrea es el Pulsar Merger LRF XP50. Durante el viaje, también tuvo la oportunidad de probar el nuevo modelo XL con sensor HD: «El XL es aún mejor [que el XP] y los detalles y la visión que se obtienen con este dispositivo son alucinantes… Se pueden observar animales a una distancia enorme. Nunca me canso de observar con ellos. La calidad me sorprende todo el tiempo».
Erik está de acuerdo: «El Merger es, sin duda, el mejor dispositivo para la observación. Es fantástico poder usarlo cuando ya estás colocado, ya sea en el suelo o en una torreta de cazadores. Y resulta muy cómodo para utilizar en la observación en todo momento».
La comodidad, por supuesto, tiene que ver con el doble ocular y su excelente ergonomía, mientras que el mencionado sensor es el principal responsable del increíble nivel de reconocimiento de los detalles. Estamos impacientes de que lo pruebe usted mismo y, mientras tanto, le invitamos a disfrutar de los magníficos paisajes noruegos, tanto a través de la visión térmica, como digital en el vídeo.
Antes de comprar cualquier dispositivo de visión nocturna o térmica, asegúrese de respetar la legislación local y de utilizarlo solo cuando esté permitido. Nuestros embajadores proceden de varios países y viajan mucho, lo que les permite probar diferentes dispositivos. No fomentamos ni apoyamos el uso ilegal de nuestros dispositivos en ningún evento. Si desea obtener más información sobre la política de restricción de exportaciones y ventas, visite el siguiente enlace: Política de restricciones de exportación y venta.