Expert Contributor:
Peter Gibbon, Vito Cortese
Cuando la gente imagina a un cazador, suele pensar en alguien que se mueve silenciosamente por el bosque, solo y totalmente concentrado. Aunque muchos cazadores disfrutan de la paz y la independencia que les proporciona la caza en solitario, hay otra cara de la experiencia de caza: las risas compartidas, el trabajo en equipo y la conexión que se crea al cazar en compañía de otras personas. Tanto si cazan solos como en grupo, ambos estilos determinan la forma en que los cazadores se mueven, piensan y utilizan su equipo en el campo.
Dos apasionados cazadores, Peter Gibbon, del noreste de Escocia, y Vito Cortese, de Sicilia, comparten cómo la comunidad, la tradición y la tecnología dan forma a su tiempo en la naturaleza. Sus respuestas demuestran que la caza no se reduce al objetivo, sino a las personas con las que se conecta en el campo y cómo eso lo cambia todo.
Para Peter Gibbon, tanto la caza en solitario como en grupo son importantes. Pero en los últimos años, la atracción por la comunidad se ha fortalecido. «Últimamente, tiendo a disfrutar más de la caza en compañía. Es estupendo compartir la experiencia, reírse y simplemente disfrutar de pasar tiempo juntos al aire libre», afirma. Cuando caza en grupo, adapta su equipo: «Puede que lleve equipo adicional por seguridad y para comunicarme. Cuando voy solo, voy ligero y solo llevo lo que realmente necesito».
Peter Gibbon
Últimamente, tiendo a disfrutar más de la caza en compañía. Es estupendo compartir la experiencia, reírse y simplemente disfrutar de pasar tiempo juntos al aire libre
Aun así, ambos cazadores reconocen la claridad única que se obtiene al estar a solas en la naturaleza. «Cazar solo es como pulsar el botón de reinicio», explica Peter. «Hay silencio, no hay presión y puedo concentrarme solo en el momento. Solo tengo que preocuparme por mí mismo, lo que hace que todo sea un poco más sencillo. También es una buena oportunidad para pensar y disfrutar de la paz».
Vito ve el tiempo a solas de otra manera, no como una preferencia, sino como un momento que sigue aportando conexión: «Sin alguien a mi lado, no tendría a nadie a quien transmitir mis conocimientos. No podría compartir lo que he aprendido».
Hay un cambio real de mentalidad al pasar de la caza en solitario a la caza en grupo, pero ninguno de los dos cree que cambie su forma de ser. «Soy el mismo en ambas situaciones», afirma Peter. «Mi confianza y mi concentración se mantienen bastante estables, solo que la experiencia es diferente dependiendo de con quién esté». Vito está de acuerdo: «Es evidente que las emociones cambian, pero lo que no cambia es mi identidad como cazador. Ya sea solo o en compañía, el instinto, los sentidos y la confianza en uno mismo no son cosas que puedan cambiar».
En las salidas de caza de tipo social, el espíritu de equipo suele traer mejores resultados y mejores recuerdos. «Se comparten los momentos buenos y los malos, se disfruta de la compañía de los demás y se trabaja en equipo», dice Peter. «El trabajo en equipo también permite planificar mejor y cubrir más terreno». Por razones prácticas, también es importante contar con ayuda: «Arrastrar o transportar la presa no es tarea fácil».
Vito ve las salidas de caza en grupo como una colaboración en un taller creativo: «Cazar en compañía es como el proceso de brainstorming cuando se trabaja en una empresa, investigando una nueva tecnología. Cada consejo, palabra o mirada de quienes cazan con usted puede hacer que el día merezca la pena». Pero incluso en grupos informales, la estructura juega un papel importante. «Un líder con conocimientos, proactivo y versado en el uso de las nuevas tecnologías es imprescindible para un equipo que quiera sacar el máximo partido», añade.
Vito Cortese
Ambos cazadores dan mucha importancia a la formación en tutoría, y el equipo desempeña un papel crucial a la hora de abrir puertas a otros nuevos cazadores. «Me encanta iniciar a gente nueva en la caza», afirma Peter. «Les dejo probar mi equipo, como ropa térmica y óptica, lo que les ayuda a ver cosas que de otro modo se perderían».
Vito ha hecho lo mismo con su primo: «El hecho de que trabaje con varias empresas del mundo de la caza y tenga acceso a equipos caros le ha permitido interesarse cada vez más por las nuevas tecnologías». La tecnología no solo ayuda a los principiantes a ver mejor, sino que les ayuda a sentirse más seguros, incluidos e inspirados.
Tanto para Peter como para Vito, la tradición no es algo que se supere con el tiempo, sino que representa el fundamento de su vida como cazadores. Ya sea en las Highlands escocesas o en las colinas de Sicilia, transmitir historias, habilidades y valores es lo que hace que la caza siga teniendo sentido. «Es fundamental enseñar a la gente la forma correcta de hacer las cosas, no solo el cómo, sino el porqué», afirma Peter.
La tecnología puede dar forma a las herramientas, pero no sustituye la conexión humana. Como explica Vito: «Incluso hoy en día, muchos cazadores ven las nuevas tecnologías, como los niños ven las cosas nuevas y desconocidas, con admiración, asombro y quizás un poco de miedo». Esa mezcla de reverencia por el pasado y curiosidad por el futuro es lo que define al cazador actual. Para ambos, el equipo no supone una distracción, sino una forma de visibilizar la tradición, de mostrar y compartir la experiencia con mayor claridad. Como dice Peter: «Al fin y al cabo, se trata de compartir historias, lecciones y tiempo juntos en el campo».
Tanto Peter como Vito participan activamente en la comunidad Pulsar y ambos afirman que es la comunidad la que les inspira. «Me ha abierto las puertas a conversaciones con cazadores de toda Europa», comparte Peter. «He tenido la suerte de compartir algunas de esas historias con la audiencia de mi podcast».
Vito está de acuerdo: «Personalmente, lo que me impulsa a hacer lo que hago es mi inclinación a ayudar a quienes me miran, a resolver sus problemas, a aconsejarles sobre formas de experimentar la caza que quizás aún desconocen, de tal manera que todo sea más agradable y fácil». Y todo empezó con un sueño: «Unirme a Pulsar era mi sueño desde niño. Recuerdo la mirada de mi padre en las ferias, mirando con orgullo los productos Pulsar».
Está claro: ya sea caminando solo o en compañía, lo que realmente impulsa una salida de caza no es solo el equipo, sino las historias, los recuerdos y las personas que están detrás de todo.